Cuantificación de los daños morales

Sentencia del Tribunal Supremo núm. 356/2022, de fecha 20 abril de 2022 (Rec. 2391/2019).

Un trabajador fue despedido de forma injustificada como represalia tras haber denunciado a una trabajadora y a la empresa por tres delitos continuados de revelación de secretos.

Para fijar el quantum indemnizatorio habrán de valorarse las circunstancias particulares de cada caso, como son: la antigüedad del trabajador, la duración temporal del daño, si concurre reincidencia, etc.  dado que la horquilla de sanciones ofrecida por la LISOS es demasiado amplia.

En este caso, teniendo en cuenta que la antigüedad del trabajador asciende a 18 años y que este se encontraba de baja por IT cuando fue despedido, incapacidad que además deriva de la situación creada en la empresa como consecuencia de los hechos que el trabajador más tarde denunciaría y por lo que sería represaliado, la Sala fija ella misma la indemnización (para evitar dilatar de forma innecesaria el resarcimiento del daño sufrido) en 60.000€, cantidad equivalente a dos anualidades y que coincide con el valor intermedio del rango de la sanción previsto en la LISOS para la situación.